Cada vez hay más gente que cree que los ovnis existen y que hace tiempo que entramos en contacto con extraterrestes, solo que el gobierno lo esconde. Los expertos en estos temas para defenderse recurren a archivos desclasificados, declaraciones oficiales, noticias de los periódicos, testimonios... La verdad es que toda esta creencia es fruto de una campaña de manipulación organizada por las grandes potencias. Tales archivos, documentos y "pruebas" han sido colocados ahí por alguien interesado en crear ufólogos.
El fenómeno ovni es utilizado con varios objetivos. El primer objetivo, el más importante por el momento, es el de encubrir pruebas y maniobras militares. Así pues, la gran mayoría de avistamientos son reales: los testimonios han visto aeronaves, misiles y otro tipo de artefactos militares creados por el ser humano. Como vimos en "Los secretos de las armas de Hitler", los platillos volantes seguramente existen y fueron diseñados durante la Segunda Guerra Mundial. Haciendo creer a las personas que se trata de extraterrestres se desvía la atención de la cuestión militar.
El segundo objetivo es generar un gran caos informativo. Crear caos informativo es una táctica común para tapar y distorsionar todas aquellas informaciones que a uno no le conviene que salgan a la luz. Así la gente no sabe a que atenerse y se hace difícil discernir qué es verdad y qué no. Además, como ocurre con la teoría de los reptilianos por ejemplo, puede servir para generalizar y ridiculizar ante la opinión pública a un sector peligroso de la sociedad: los denominados "conspiracionistas".
Por último, puede que haya un objetivo que va mucho más allá. Se está preparando poco a poco a la población para asimilar la existencia de aliens. Eso es porque hace mucho tiempo que está en mente la idea de un gran evento de falsa bandera: una falsa invasión extaterrestre. Los extraterrestes serían el siguiente gran enemigo straussiano después de la amenaza terrorista. La amenaza externa no serviría únicamente para crear cohesión dentro del Imperio, sino para unificar al mundo entero. Sería por lo tanto un proyecto a largo plazo que se llevaría a cabo tras el establecimiento del "Gobierno Mundial" y, entonces sí, el fin de la historia.
Calbert