sábado, 23 de abril de 2011

Aborto, ¿Sí o no? Ninguno de los dos

En 2009 se aprobó la reforma de la Ley del Aborto de 1985. Fue una noticia muy polémica que con el tiempo ha acabado por olvidarse. ¿Pero se ha discutido detenidamente esta reforma? Si se ha hecho, no lo parece. Seguramente no se hizo caso a los que sí sabían de lo que hablaban. 
Feto de 3 meses
Para empezar a discutir este tema hay que tener conocimientos acerca de tres cosas: sobre biología, sobre ética y sobre las dos leyes del aborto en concreto. En este blog ya hablamos sobre los fetos, la gestación, los embriones, etc., en los dos documentales de National Geographic: La increíble máquina humana y En el vientre materno. Un feto es un humano en sus primeras etapas de desarrollo. No se trata de un montón de carne y huesos sino que a los pocos meses ya tiene todas sus estructuras formadas. Tiene corazón, manos, ojos... Durante la gestación se moverá, sonreirá, sentirá y, durante los últimos días, incluso empezará a aprender. Hablamos de una vida humana, he aquí donde se nos presenta el dilema ético. ¿Podemos jugar a ser dioses y decidir si vive o muere? ¿Es más importante el bienestar de la madre que el de su hijo en sus primeras etapas de vida? Aunque parezcan preguntas muy complicadas de responder, en realidad, todo este embrollo tiene una solución muy simple y razonable. ¿Por qué discutir si se debe abortar o no, si se puede evitar la discusión? Con el simple hecho de ponerse un preservativo todo el problema ético desaparece. Ya no se forma ninguna vida humana, por lo tanto, no hay ningún dilema. La solución consiste en aplicar el principio de prevención. Y entonces, ¿Por qué tanto revuelo en los medios de comunicación? Básicamente lo que se hizo es desviar la atención hacia un problema inexistente. Algunos intentarán ponerte en un aprieto y te preguntarán: ¿Y si una mujer es violada? ¿Y se el feto presenta algún tipo de patología que puede hacer sufrirle cuando crezca y puede hacer sufrir a la madre? ¿Y si directamente la vida de la madre o la salud mental están en riesgo? Estas preguntas lo único que demuestran es que quién las ha formulado no se ha dignado a informarse antes de preguntártelas. Y la razón es que la Ley del aborto de 1985 ya contemplaba estos casos. La ley del aborto anterior no prohibía el aborto. Solo lo limitaba a cuando fuera totalmente necesario. Y en los demás casos se debía aplicar el principio de prevención. ¿Y si se rompe el preservativo? Éste es el único inconveniente que no tiene una respuesta clara. Pero la solución no se encuentra en permitir el aborto a cualquiera. Seguramente el número de veces que una mujer queda embarazada por defectos en el preservativo debe ser mínimo, ya que el control al que son sometidos es muy estricto. Pero dejando de banda este caso en particular que formaría parte de otro debate, nos encontramos con que la reforma de la Ley del Aborto de 2009 se ha llevado a cabo sin sentido alguno de la responsabilidad o de la ética. Aquellas personas que no entienden la responsabilidad de sus actos y que mantienen relaciones sexuales sin protección sin querer tener un hijo necesitan más educación. Y esta cultura de la irresponsabilidad es la que ha difundido el gobierno y las empresas que viven del negocio del aborto. Ganan dinero a partir de vidas humanas. Ahora vivimos en un país donde las chicas de 16 y 17 años no tienen criterio para poder votar pero sí lo tienen para poder decidir si su hijo (de hasta 14 semanas de vida) vive o muere, sin siquiera decírselo a sus padres.

Calbert